Organizar un lavadero muy pequeño es todo un reto, pero no es una misión imposible. Con un poco de planificación podemos convertir un par de metros cuadrados en un espacio altamente funcional y estéticamente bonito. Contar con un cuarto de lavado en casa tiene múltiples ventajas. En primer lugar, centraliza todas las actividades relacionadas con el lavado y el cuidado de la ropa en un solo lugar, por lo que podemos tenerlo todo más organizado. Además, ayuda a mantener el resto de la casa libre de objetos relacionados con la limpieza, lo que mejora el orden general del hogar.
Cómo organizar un lavadero muy pequeño
En un lavadero bien equipado no pueden faltar una lavadora y una secadora, o bien un tendedero con pinzas, así como cestos y algún armario o estantes para guardar cosas.
También es esencial tener a mano detergentes, suavizantes, quitamanchas y otros productos de limpieza, además de una plancha y una tabla de planchar. Una vez que lo tenemos todo, ¿cómo organizar un lavadero muy pequeño? A continuación te dejamos algunos consejos útiles.
1. Usar dispensadores
En lugar de mantener los productos de limpieza en sus envases originales, una idea es transferirlos a contenedores y dispensadores. Además de ahorrar espacio, se consigue un aspecto más ordenado y también mejora mucho la estética. Los dispensadores de detergente líquido y suavizante, por ejemplo, pueden montarse en la pared para liberar espacio en las superficies de trabajo.
2. Ocultar los electrodomésticos
Existe la opción de instalar armarios a medida que permitan esconder la lavadora y la secadora cuando no están en uso. Así, el espacio parecerá más limpio y organizado. Además, estos armarios pueden incluir estanterías o colgadores para almacenar productos de limpieza y otros accesorios.
3. Instalar una puerta corredera
Si el cuarto es muy pequeño, puede ser interesante instalar una puerta corredera. Estas puertas cuentan con un sistema que no requiere espacio para abrirse, lo que nos permite aprovechar al máximo cada centímetro disponible de la estancia.
4. Contar con un tendedero plegable
Un tendedero plegable es otro elemento clave para organizar un lavadero muy pequeño. Estos tendederos pueden fijarse a la pared y desplegarse solo cuando se necesiten, de forma que se libera un espacio muy valioso cuando no se están usando. Algunos modelos incluso pueden integrarse en los armarios para ocultarlos completamente.
También se puede recurrir a cestos para la ropa plegables que se puedan recoger para despejar la habitación cuando no se necesitan.
5. Utilizar colgadores de pared
Para aprovechar al máximo el espacio vertical, los colgadores de pared y el almacenaje en altura son la mejor opción. En el mercado podemos hacernos con ganchos y barras que se pueden instalar en las paredes para colgar escobas, mopas y otros utensilios, manteniéndolos accesibles, pero fuera del camino. Las baldas y cestas apilables también son ideales para organizar productos de limpieza, toallas y otros artículos.
6. No usar el lavadero como trastero
Es importante no acumular objetos innecesarios en el lavadero, mucho más si es pequeño. Mantener este espacio despejado facilita las tareas diarias y reduce el estrés visual. Una buena práctica es trasladar los artículos que no se usan con frecuencia a un trastero o a otro espacio de almacenamiento. De esta forma, el lavadero se mantiene ordenado y dedicado exclusivamente a su función principal.
Si necesitas espacio extra para guardar pertenencias que ocupan demasiado para poder organizar un lavadero muy pequeño, puedes recurrir a nuestros servicios de almacenaje. En Grupo La Nave contamos con diferentes opciones, flexibles y adaptadas a cada familia. Si tienes dudas, contáctanos para ampliar información.
