Cuando se trata de cómo hacer una mudanza, lo mejor es tomárselo con calma y sin agobiarse. Nada de dejarlo todo para última hora. Aunque todavía quede tiempo para la fecha en la que dejarás tu casa, hay cosas que puedes ir empezando a preparar.
Qué necesitas para hacer una mudanza
Cajas de varios tamaños
Uno de los trucos de mudanza más importantes que te podemos dar es que te hagas con cajas de diferentes tamaños, porque no en todas vas a poner lo mismo. Por ejemplo, una caja grande te puede resultar muy útil para guardar ropa de cama, cortinas, cojines, etc. pero si llenas una caja grande de libros es posible que no puedas con ella.
Por eso, mejor contar con cajas de diferentes tamaños y usarlas de la forma más inteligente posible.
Enseres de embalaje
Papel de burbujas, papel de periódico, sábanas viejas… todo aquello que te pueda ayudar a evitar que los objetos frágiles (copas, vajilla, etc.) se puedan romper. Además, también vas a necesitar tijeras, cúter, y cinta de embalar.
Un trastero
Si tienes demasiadas cosas y no quieres llevarlas todas de golpe a tu nuevo hogar, la solución más sencilla es alquilar un trastero e ir guardando allí todas tus cosas. Esto te permitirá no vivir rodeado de cajas tanto en los últimos días en tu actual vivienda como en los primeros días en tu nuevo hogar, lo que reducirá tus niveles de estrés.
Cómo hacer una mudanza ordenada paso a paso
Haz una revisión a fondo de tus cosas
Seguro que en tu casa hay bastantes cosas que hace mucho tiempo que no usas ni tienes previsto utilizar en un plazo más o menos corto. ¿Para qué vas a llevarlas contigo?
Antes de empezar a embalar tus enseres haz un repaso a fondo de los mismos y deshazte de lo que ya no necesites. Puedes donarlo o venderlo. La idea es que te lleves a tu nueva casa solo aquello que de verdad sea necesario.
Empieza a embalar lo que ya no necesitas
Aunque todavía falten unas semanas para la mudanza, puedes empezar a recoger aquello que sabes seguro que no vas a necesitar. Puedes recoger los libros, la ropa que no estás usando por no ser de temporada, cuadros, fotos, la cristalería, etc.
Una buena opción es aprovechar y llevar cortinas, alfombras y otros textiles al tinte. Así te aseguras de que llegan en óptimas condiciones para ser instalados en tu nueva casa.
Prepara un “cofre del tesoro”
Puede ser una caja, una pequeña maleta y hasta una carpeta. En ella vas a guardar aquellos enseres que no quieres perder bajo ningún concepto. Esto incluye principalmente las joyas y objetos de valor y la documentación: pasaportes, libro de familia y similares.
Déjala preparada y asegúrate de que tú mismo te encargas de su traslado, nada de dejarla en el camión de mudanzas.
Pon información en las cajas
Cuando tienes dos cajas no es problema saber qué hay en cada una, pero cuando tienes que meter todas tus cosas en cajas, la cosa se complica. En cuanto tengas cuatro o cinco ya no sabrás que hay en cada una de ellas.
La mudanza será mucho más sencilla si en cada caja indicas la habitación a la que pertenece y pones unas pequeñas indicaciones sobre el contenido. Por ejemplo: “habitación matrimonio – ropa cama”.
Esto te lo pondrá mucho más fácil cuando llegue el momento de empezar a poner todas tus cosas en tu nuevo hogar.
No saques las cosas de los cajones
Si te vas a llevar contigo tus muebles, puedes ahorrar tiempo si no sacas todo el contenido de los cajones. Eso sí, asegúrate de que los cierras bien y los aseguras con cinta de embalaje para que no se abran durante el transporte. Así, una vez que el mueble esté en la nueva casa no tendrás que estar colocando pequeñas cosas como la cubertería.
Limpia la casa nueva
Al pensar en cómo organizar una mudanza solemos centrarnos mucho en recoger nuestras cosas y prestamos poca atención a la nueva casa, pero es imprescindible que esté limpia cuando entres allí a vivir.
Si no tienes tiempo para una limpieza a fondo, te ahorrarás mucho estrés si dejas esta tarea en manos de profesionales. De esta forma, cuando llegues solo tendrás que empezar a poner cada cosa en su sitio, sin tener que limpiar nada antes.
Prepara un kit de supervivencia
Es posible que tardes un poco en tenerlo todo listo en tu nuevo hogar. Para que esto no se convierta en un problema, asegúrate de que cada miembro de la familia tiene su propio kit de supervivencia. Se trata de una pequeña maleta con ropa para uno o dos días, un par de toallas y productos de aseo.
Esto evitará que nada más llegar a tu nuevo domicilio tengas que ponerte a abrir cajas para localizar lo que necesitas de forma inmediata.
No dejes nada sin colocar
Uno de los mejores consejos para una mudanza ordenada que podemos darte es que te pongas manos a la obra lo antes posible una vez que te hayas instalado en tu nueva casa. Asegúrate de que colocas todo lo que necesitas.
Como te dejes una caja sin abrir, puede seguir así durante meses y meses. Tómatelo con calma, pero coloca todo en su sitio. Si ves que algo no te hace falta, deshazte directamente de ello, no lo dejes empaquetado.
Haz un plan de acción
Si sigues todos estos pasos el cambio de una casa a otra será mucho más sencillo. No obstante, si quieres que la mudanza sea todavía más fácil, puedes elaborar tu propio calendario de acción. Así sabrás en qué momento debes hacer cada cosa y lo tendrás todo controlado.
Por ejemplo, un mes antes empezar a recoger los enseres que ya no necesitas y buscar un trastero de alquiler. Dos semanas antes de la mudanza hacer la limpieza de la nueva casa y preparar el cofre del tesoro. Una semana antes, preparar el kit de supervivencia y comprobar que todo está listo para el traslado.
Cuando se trata de cómo hacer una mudanza una buena organización puede ser la clave para que disfrutes del proceso y no te estreses más de lo necesario.
