Con la llegada del frío, mucha gente se interesa por ideas para guardar los zapatos de verano. El objetivo es doble: evitar que estén en casa estorbando y conseguir que se mantengan en perfecto estado para cuando llegue el momento de volver a usarlos.
Por eso, queremos mostrarte algunas fórmulas para lograr estos dos propósitos, aunque primero nos centramos en la pregunta de cómo guardar los zapatos. Más adelante centraremos el interés en los consejos para ordenar zapatos en cajas y guardarlos en lugares seguros y accesibles.
Pasos para conservar bien tus zapatos de verano durante el invierno
La tarea de guardar zapatos cuando llega el cambio de estación está precedida de algunas recomendaciones para que el calzado se mantenga en perfecto estado. Si estás pendiente a ellas, en la próxima temporada tendrás todos tus zapatos como nuevos.
Limpiar y rellenar el calzado antes de guardarlos
Es imprescindible que guardes los zapatos limpios antes de pasar una buena temporada sin usarlos. Para ello primero debes retirar el polvo con un trapo seco o un cepillo con cerdas suaves, pasarle un poco de crema incolora y rellenar su interior con papel de periódico o pequeñas bolas de poliexpán. Ah, y no olvides llevar el calzado a un zapatero y arreglar los desperfectos antes de que pasen una temporada en boxes.
La tarea de limpieza implica revisar la suela, los tacos de estas, las plantillas y los cordones. Si alguno de estos elementos está muy deteriorado conviene cambiarlos antes de guardar el calzado. También puedes poner un poco de ambientador para que no adquieran el clásico olor a cerrado. Y por supuesto, los zapatos siempre secos.
Cajas para guardar zapatos
El mejor lugar para guardar el calzado es el embalaje original, es decir, la caja de zapatos en la que venían. Si los has adquirido sueltos, sin caja, prueba a usar otra que tengas en casa, pero siempre respeta el tamaño de los zapatos, que no queden excesivamente apretados.
Cajas de plástico etiquetadas
Una tercera fórmula para ordenar zapatos es usar grandes cajas de plástico. Es la alternativa al embalaje original o bien, si el continente de plástico es suficientemente grande, introducir varios pares en sus respectivas cajas, siempre que sean del mismo uso: chanclas, sandalias, zapatillas de deporte… La caja de plástico ha de ir etiquetada y a ser posible que sea translúcida o transparente, para ver qué calzado hay en su interior.
Muebles organizadores de zapatos, los tradicionales zapateros
Has llegado hasta aquí buscando respuestas a la pregunta de cómo guardar zapatos cuando vas a pasar una larga temporada sin utilizarlos. La opción ideal es introducirlos en su caja original, pero hay otras alternativas y una de las más populares es usar un zapatero, es decir, un mueble organizador de zapatos.
Una simple estantería en la pared sirve como zapatero. Es una fórmula que ofrece muchas ventajas: amplio espacio de almacenamiento, mucho orden y rapidez a la hora de acceder a ellos.
Un zapatero de tela
La última propuesta es especialmente interesante para quienes no disponen de suficiente espacio en casa. Es parecida a la estantería a modo de zapatero que comentábamos anteriormente, pero con colgadores de tela.
Se pueden situar dentro del armario o tras una puerta. Se venden en tiendas de decoración y en otros muchos establecimientos. No obstante, el inconveniente con esta fórmula es que los colgadores no son tan resistentes y si nos están bien anclados a la puerta, se pueden caer. Además, es mejor para uso constante, no para almacenar calzado que no vas a volver a usar en meses.
Consejos para guardar tus zapatos de verano fuera de temporada
Ya hemos visto algunas recomendaciones para guardar y ordenar zapatos en cajas, pero ahora llega el momento de anunciar cuáles son los mejores espacios en la vivienda o fuera de ella para tenerlos siempre localizados.
Guardar zapatos bajo la cama
El bajo de la cama es un espacio de almacenamiento muy aprovechable, pero debe estar limpio, sin motas de polvo y sin humedad, para alejar la llegada de insectos. Una opción interesante para guardar zapatos en esta zona es usar una caja con ruedas.
Sobre el armario, en los altillos
La segunda posibilidad, también en casa, es aprovechar los espacios altos sobre algunos muebles como estantes o armarios. El problema más aparente es el mismo que bajo la cama, al ser un lugar de poco uso, es posible que vaya acumulando polvo. Deberás evitar eso, especialmente si no guardas los zapatos en cajas.
Alquilar un trastero o un pequeño almacén
Si no te convence ninguna de las opciones anteriores, o prefieres ganar esos espacios para otros usos, en Grupo La Nave ponemos a tu disposición trasteros y minialmacenes que cumplen con todo lo necesario para mantener el calzado en perfecto estado.
Las posibilidades que ofrecemos son muy variadas: desde pequeñas taquillas hasta trasteros pasando por minialmacenes de mayor tamaño. Esta última es una opción perfecta para clubes o para pequeñas empresas que solo hacen uso de determinados materiales en una parte específica del año.
Nuestros espacios de almacenamiento están disponibles las 24 horas y 365 días al año, solo son accesibles por parte de los clientes, están protegidos en todo momento y son realmente cómodos, pues existe parking privado para carga y descarga desde el mismo trastero o almacén.
A su vez, son lugares que ofrecen una temperatura apta para evitar el deterioro del calzado, totalmente libre de insectos y donde los zapatos están completamente seguros. En Grupo La Nave ofrecemos disponemos de servicios de alquiler flexible con opciones adaptadas al espacio que necesites.
Las ideas para guardar zapatos son muy variadas, pero lo esencial es que el calzado esté bien protegido. Para ello deberás limpiar los pares bien, secarlos para que no acumulen humedad, encontrar un lugar alejado de polvo e insectos y tratar que no estorben por casa. En Grupo La Nave tenemos la propuesta perfecta para cumplir con este objetivo: alquileres flexibles y con todas las garantías de una empresa de prestigio.